EL LIDERAZGO (I)

Inquietudes, 12 de agosto de 2008

El liderazgo (I)

 

 

Por JUAN FRANCISCO PEREZ MERCADO

 

 

Me propongo hablar del liderazgo, un tema de palpitante actualidad, y empezaré formulando una pregunta lógica: Que necesita una persona para ser líder?

 

El hecho de que una persona sea o no líder, depende de su personalidad. El concepto personalidad podemos definirlo como una combinación de rasgos que definen el comportamiento de una persona. Los rasgos son características que distinguen a las personas. 

 

La influencia que el líder ejerce sobre sus seguidores depende de la personalidad del primero, ya que esta es la que determina sus actos. La personalidad, científicamente definida por Gordon W. Allport, psicólogo de la Universidad de Harvard, es "la organizaci6n dinámica al interior del individuo de los sistemas psicofísicos que determinan su pensamiento y su acción". En otras ocasiones hemos presentado esta definición como correspondiente al carácter, término que, siendo en general sinónimo de personalidad, nosotros preferimos por su connotación moral. 

Rigurosamente, existe una diferencia entre los dos términos, la cual es brillantemente expuesta par Allport cuando dice que "la personalidad es el carácter no valorado, y el carácter la personalidad valorada". El concepto de valoración elude a la moral por tratarse de una valoración moral. He aquí la razón por la cual en trabajos anteriores preferimos utilizar la palabra carácter, ya que el contenido de nuestros artículos es predominantemente un contenido ético. Los psicólogos prefieren el término personalidad, ya que por su correlato ontológico es el más apropiado para el análisis científico. En cambio, el término carácter, que alude también a los elementos de la personalidad, tiene adicionalmente un aspecto moral.

 

Pues bien: La Teoría de los Rasgos, que se refiere a la personalidad, fue el fundamento para el estudio que se ha realizado sobre liderazgo. Dicha teoría se denomina Método del gran hombre (o de la gran persona) y buscaba identificar que atributos poseen los buenos líderes. Como uno de los resultados de las investigaciones, se elaboró el Modelo de las cinco grandes dimensiones de la personalidad. 

Este modelo sirve para clasificar los rasgos de la personalidad dentro de alguna de las cinco dimensiones de la misma, Estas dimensiones son: Emocionalidad, empatía, ajuste, escrupulosidad y apertura a la experiencia. A continuación analizaremos cada una de estas dimensiones:

 

Emocionalidad: Las personas que tienen marcados rasgos de emocionalidad son dominantes y siempre quieren hacerse cargo de la situación. Su comportamiento dominante oscila entre el interés por llevar la delantera y dirigir, competir e influir. En esta dimensión se ubican los rasgos de liderazgo y extroversión.

 

Empatía: Los rasgos de armonía interpersonal están dentro de esta dimensión. Los extremos son, por una parte, la calidez, el trato fácil, la compasión, la amistad y la sociabilidad; y por la otra, la frialdad, la dificultad en el trato, la impasibilidad y la actitud poco amigable y antisocial.