CRISIS ECONÓMICA, LA MORAL Y LA EDUCACIÓN (XI)
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Crisis económica, la
moral y la educacion XI
Por JUAN FRANCISCO PEREZ MERCADO
Otras acciones pedagógicas que sugiero para la educación en moral de
mínimos son las siguientes:
1. Desarrollar cursos con la
misma orientación hacia la formación en moral de mínimos, en los centros
de reclusión penitenciaria, dirigidos a todas las personas que se hallen
privadas de la libertad. Estos cursos subsanarían la grave y tradicional
omisión del Estado al limitarse a sancionar el acto externo violatorio de la ley,
dejando intactos los complejos fenómenos que en el fuero interno generaron el
acto ilícito, los cuales tienen el poder de seguir generando actos
similares al que se reprime. Los aprendizajes obtenidos en estos cursos serán
un poderoso incentivo para la transformación del carácter del sujeto privado de
la libertad, hecho que constituye una auténtica rehabilitación.
Si se toma esta medida, las cárceles dejarán de
ser las escuelas del crimen que hoy son, para
convertirse en escuelas de reeducación en moral de mínimos...
2. Impartir en las instituciones
educativas de todos los niveles cursos de ética con contenidos similares a
los mencionados, con programas diseñados de conformidad con el nivel de los
estudiantes.
Insistimos en que esta educación versará sobre la moral de mínimos,
moral social o ética cívica, cuyo objeto es la justicia, y no sobre ninguna de
las morales de máximos, cuyo objeto es la felicidad, pues en este
último tipo de moral está vedada la intervención tanto del Estado como de
los particulares.
Este punto requiere que la educación ética no sea solo teórica sino
que el ambiente y las interrelaciones humanas en la institución estén alineados
y en correspondencia con los contenidos teóricos del programa.
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