LA CORRESPONSABILIDAD
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| -Inquietudes-17 de Agosto de 2007 |
La
corresponsabilidad
Por JUAN FRANCISCO PEREZ MERCADO
La figura de la corresponsabilidadnace, no solo del deficiente cumplimiento de los deberes de justicia conmutativa, distributiva y legal, sino tambien y sobre todo, de los deberes de justiciasocial, es decir, la
justicia para todos sin distingos de sexo, raza, edad,
estirpe o condición.
El tipo de relación de la que brota la necesidad de la justicia social es la relación consistente en la ligación o
el lazo producido por la identidad
de carne, de hueso y de sangre que hay
entre todos los seres humanos y, particularmente,
en el vínculo social y político de la nacionalidad compartida. De esta ligación natural
existente entre todos los hombres, nace para cada persona la obligación de velar, junto a otras personas, porque a todos
los hombres, no a unos si y a otros
no, sino a todos, se les respeten los
derechos humanos y los derechos pragmáticos o adventicios. Y tambien la obligacion
de intentar encontrar, junto con
otros, las soluciones adecuadas para
las dificultades que impiden el respeto de estos derechoos, y
la de intentar promover, siempre junto con otros, instituciones que tengan el
poder suficiente paraasegurar este respeto.
Esta es la corresponsabilidad.
La
corresponsabilidad no implica una responsabilidad individual directa por la
marginación o exclusión de que se hace
víctimas a millares de seres, pero si es una res-
ponsabilidad colectiva directa, e
individual indirecta, respecto
del deber que cada persona tiene de unirse a otros para evitar la injusticia social
infligida a seres que son "came de mi carne, sangre de mi sangre y huesos de mis
huesos".Setratadeunaresponsabilidadcompartida con otros que, como todos, están obligados por la ligación natural que nos une a tales
seres injustamente excluidos
del bien común.
La corresponsabilidad es universal, es decir, que comprende a todos los seres humanos que habitan la tierra, porque a todos nos une el mismo laxo o ligación natural. Pero ¡ay, mi débil voz de exhortación y aliento¡,
y a la vez de censura, no
llega a todos ellos. Quizás pueda llegar
tan siquiera a los colombianos, a quienes nos une, ademas, otro vinculo social y político que nos
obliga a todos por igual: la nacionalidad.
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